Soñé que mi cara estaba pálida.
Sueña que tu cara es pálida, presagia un mal humor reciente, se sentirá triste o triste.
Sueña con la cara pálida de tu esposa, presagia que recientemente se enfrentará a la moral corrupta, la gente de la calle caliente, sugiere que tengas cuidado con hacer amigos.
Las mujeres casadas sueñan que están pálidas, lo que indica que pronto estarán embarazadas.
Soñar con un marido pálido es un presagio de una mala salud, una enfermedad grave o una familia que se queda en cama.
Los jóvenes sueñan con parejas pálidas, lo que indica que su amor sufrirá giros y giros, y que el matrimonio será fuertemente objetado por los padres de la mujer.
Soñar con que sus hijos se vuelvan amarillos indica que los ingresos recientes disminuirán y que la vida será cómoda.
Los prisioneros sueñan que su cara está pálida, lo que indica que usted será liberado pronto con la ayuda de sus seres queridos.
Los pacientes sueñan que su cara es pálida, lo que indica que su enfermedad pronto se recuperará, su cuerpo se recuperará, más atención y ejercicio en el futuro.
El hombre de negocios sueña que su cara está pálida, presagia mala fortuna, pérdida de dinero o depresión en el negocio, ingresos disminuidos, le aconseja que se lleve bien con la estrategia, la mejora oportuna.
El sueño de un ladrón de que su cara es pálida indica que usted puede hacer una gran fortuna en el robo en el futuro cercano, pero sólo para evitar ser encarcelado.
Los buscadores de empleo sueñan con una cara pálida, anunciando que pronto encontrarán un trabajo bien pagado y la vida se hará rica.
Los ancianos sueñan con su cara de cera amarilla, presagiando una vida en peligro, pronto ascenderá al cielo, es un mal augurio.
Sueña con extraños pálidos, presagia mala suerte financiera reciente, los ingresos disminuirán, ten cuidado con los villanos a tu alrededor, para evitar dañar tu reputación en la espalda.
El sueño de que el enemigo se ve pálido indica que pronto vencerá a su rival o enemigo.
Durante la guerra, los oficiales del ejército soñaron que su cara era pálida, lo que indicaba que era difícil tener éxito en la guerra y que el enemigo sería derrotado.